Gripsyl Flu - Contiene 12 Capsulas

Indicaciones: Gripsyl Flu está indicado en el tratamiento de la influenza tipo “A” causada por virus susceptibles a la amantadina. También alivia los síntomas que la acompañan, como fiebre, mialgias, escurrimiento nasal, cefalea y malestar general. La amantadina puede ser útil para la profilaxis de la influenza tipo “A” cuando los virus implicados son susceptibles a ella. Modo de Uso: Las cápsulas se deben tragar enteras con algo de líquido, sin romper, aplastar, masticar o disolver. Precauciones y Advertencias: Las precauciones y consideraciones al utilizar la amantadina, clorfeniramina y paracetamol en pacientes con ciertas condiciones médicas o situaciones de riesgo son: - Pacientes desnutridos o alcohólicos crónicos tienen un alto riesgo de daño hepático con dosis excesivas de amantadina. - La amantadina puede aumentar el riesgo de insuficiencia cardiaca congestiva en pacientes con antecedentes de esta. - Se requiere una valoración médica en pacientes geriátricos (>65 años) antes de administrar amantadina, con posibilidad de ajuste de dosis debido a la disminución de la función renal en este grupo. - La amantadina puede aumentar la propensión a las convulsiones en pacientes con síndrome cerebral orgánico o tendencia a sufrirlas. - El uso concomitante de amantadina y medicamentos neurolépticos puede causar síndrome neuroléptico maligno. Embarazo y Lactancia: No existen estudios adecuados y controlados sobre los efectos de los componentes de la fórmula de Gripsyl Flu en mujeres embarazadas. La amantadina, uno de los componentes, se excreta en la leche materna y se asocia con riesgo teratogénico de categoría "C" en todos los trimestres del embarazo. La clorfeniramina, otro componente, también tiene un riesgo teratogénico de categoría "C" en todos los trimestres, pero no se considera un riesgo elevado según datos de seguridad en humanos. No se recomienda su uso durante la lactancia. Por otro lado, el paracetamol, un tercer componente, tiene un riesgo teratogénico de categoría "B", pero su uso a dosis terapéuticas durante el embarazo se considera seguro, aunque la sobredosis o el uso prolongado pueden tener efectos adversos, como toxicidad hepática. En conclusión, se sugiere que el médico evalúe el riesgo y beneficio de administrar Gripsyl Flu durante el embarazo o la lactancia, dado el perfil de seguridad y los riesgos asociados con sus componentes.